DATOS RUTA: Altura: 1.775 ; Desnivel: 753 ; Distancia: 13,39 Km. ; Tiempo: 5,26 h.
Teníamos ganas de hacer el Pozo Negro desde la zona recreativa de Tres Aguas en Fresneda de la Sierra del Río Tirón, así que como quien llevaba el coche, tiene un todoterreno y por la zona hacia bueno, nos encaminamos a la Sierra de la Demanda en Burgos.
Tras una pequeña aventurilla para coger la pista para llegar a Tres Aguas, sobre las 11 empezamos a andar; la zona tenía un color de otoño precioso, ya que hay muchas hayas , avellanos y algunos chopos en la ribera de los ríos, que contrastan con el verde oscuro de los pinos de repoblación. Fuimos subiendo tranquilamente por la pista, hasta que llegamos al cruce, donde debíamos abandonarla ,para cruzar un arroyo y continuar monte arriba. Como venia muy crecido el arroyo, tras examinar su posible vadeo y teniendo en cuenta que sabíamos que, posteriormente, tendríamos que vadearlo varias veces, decidimos dejarlo para otra ocasión, a finales de verano o principios de otoño cuando lleve menos agua.
Así pues continuamos por la pista y cuando llegamos al final de la misma, hicimos una incursión hacia la izquierda por una pista , que se acabó enseguida, aunque pudimos recrearnos observando un tejo precioso. Volvimos a la pista de origen y, a través de un hayedo, fuimos ascendiendo hasta alcanzar un collado por el que pasaba la ruta de vuelta. Continuamos por esta hasta la Cocina del Cura, desde allí por un hayedo, campo a través, alcanzamos el Collado Hermoso y una pista forestal que nos condujo al fondo del valle, donde para seguir el camino tuvimos que atravesar un arroyo bastante crecido, pero unas piedras nos permitieron superarle. Tras un tiempo de marcha vimos que el sendero continuaba por la otra orilla, así que nuevamente, con un poco mas de dificultad lo atravesamos y cuando creíamos que ya había pasado lo peor y nos dirigíamos al Tejo Milenario, el arroyo se cruzó de nuevo en nuestro camino, aquí había un tronco medio podrido que nos sirvió para atravesarlo de rodillas.
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| Haya |
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| Valle con nieve al fondo |
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| Precioso valle |
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| Primer Tejo |
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| Lagunillas y picos nevados |
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| Vadeando por tronco |
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| Tejo Milenario |
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| Arroyo cerca de donde comimos |
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| Vadeando |
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| Vadeando |
Llegamos al tejo milenario, realmente espléndido y desde allí descendimos de nuevo al río, que vadeamos pisando piedras y agua. Como ya eran las tres pasadas, paramos a comer el bocata en un sitio algo incomodo, pero bello y 20 minutos después reiniciamos la marcha.
Como la ruta seguía por una pista fácil de andar pero muy abandonada, nos las prometíamos muy felices hasta que de nuevo llegamos a otro arroyo, mas crecido que los anteriores y que tuvimos que vadear pasándolo por un árbol pequeño e inestable, tras un rato de camino, de nuevo no podíamos avanzar y al otro lado apareció la pista que sería la definitiva, así que retrocedimos unos metros hasta que encontramos otro árbol que nos posibilitó el vadeo con mucho cuidado y siempre de uno en uno, ya que parecia endeble y podía partirse. Vadeamos el río y ahora si entramos en la pista definitiva que atravesando el río por dos puentes nos llevo hasta el refugio de Tres Aguas, donde habíamos dejado el coche, tras cinco horas y media de marcha.
Cuando llegamos nos encontramos con un grupo de montañeros de Burgos que, como nosotros iban al Pozo Negro, nos comentaron que habían atravesado el arroyo descalzandose y que los últimos metros, hasta alcanzar el Pozo Negro, habían sido muy dificiles por la pendiente y la nieve acumulada que estaba helada y resbalaba dificultando mucho el ascenso.
En resumen buen día de marcha, preciosos paisajes, mucha subida de adrenalina así como intrepidez para vadear los arroyos y ganas de volver en época de menos agua.
