DATOS RUTA: Altura 2.004; Desnivel: 927 ; Distancia. 13,1 Km.; Tiempo: 5,15 h.
El tiempo nos permitía nuevamente dirigirnos al norte, así que nos encaminamos a Casasuertes, cerca de Riaño, donde desayunamos.
Iniciamos la ruta desde el pueblo , por un sendero paralelo al río que pasa por Casasuertes, por donde fuimos ganando altura que perdimos cuando llegamos a un nuevo río, el Misón, que descendía del valle que teníamos que andar. Seguimos por un sendero que discurría también paralelo al río , para mas tarde coger una pista ancha y bien conservada. En un cruce abandonamos la pista para tomar un estrecho sendero, después dejamos este y transitamos un tiempo campo a través, entre brezo y escobas hasta que encontramos un sendero mas limpio que seguimos, con cierto cuidado, ya que en algunos sitios se perdía.
A través , pues, de escobas y monte bajo llegamos a un collado, desde el que ya se divisaba nuestro objetivo del día entre la niebla, aunque antes teníamos que superar dos crestas, pero se divisaban bien los senderos. Poco a poco llegamos al último collado y desde aquí, por una cuesta muy pindia, acercándonos a una pedrera, pero sin entrar en ella, ya que dificultaría mucho la marcha, con mucho esfuerzo, sin camino aparente, con la niebla pisándonos los talones, alcanzamos nuestro objetivo tras dos horas y cuarto de marcha, el pico Pandián o Redondo, donde, por cierto, ya habíamos estado otra vez,con mucha niebla, que nos impidió ver el paisaje y, en gran parte del recorrido, el camino y la cumbre con su vértice geodésico, que no vimos hasta estar al lado; esa vez ascendimos desde Vegacerneja.
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| Primeras estribaciones |
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| Collado con Cebolleda y Calar de Corcadas al fondo |
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| Último esfuerzo con la niebla subiendo |
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| Pandián |
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| Pandián |
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| Pantano, Gilbo y Yordas con neblina |
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| Vista general con el pantano de Riaño |
Preciosas vistas desde la cumbre, pantano de Riaño, Yordas, Gilbo, Espigüete y otras cumbres de Fuentes Carrionas, aunque algo veladas por la neblina. Tras las fotos de rigor iniciamos el descenso, ya que soplaba un viento frío del norte. llegamos a un collado, desde este campo a través, encontramos un camino que nos condujo hasta otro collado, donde al resguardo de una gran roca había un pequeño refugio, desde aquí cogimos una pista que nos llevo hasta un pequeño prado antesala de un bosque de hayas. Nos internamos en el bosque y bajando haciendo zig zag llegamos al valle del río Misón, donde cogimos la pista que recorre el valle parándonos a medio camino a dar cuenta de los bocatas, ya que eran las 15 horas. El valle es precioso, rodeado de bosques de hayas cuyo colorido en otoño tiene que ser espectacular. Continuamos por el fondo del valle hasta que retomamos la pista que habíamos recorrido por la mañana y desde esta el sendero que nos llevo hasta el coche, tras mas de cinco horas de marcha.
Durante el caminos vimos muchos rebaños de vacas, por cierto, bien gordas y lustrosas, algunos caballos y un venado que salió corriendo en cuanto nos oyó, lo que no nos permitió fotografiarle.No pudimos hacer fotos desde el valle ya que se nos acabo la pila de la máquina.
